Un nuevo personaje. Una nueva vida. Pero nada de eso me salvaría de ellos.
Los Caídos son implacables, exigentes y despiadados, y me desean.
Creía que podía esconderme de mi pasado, pero ellos saben quién soy, lo que soy. Quieren venganza. Y la tomarán, sin importar qué.
Me ven pura, inocente, y quieren empañar ese aspecto. Pero lo que no saben es que la oscuridad se abre paso en mí. Durante mucho tiempo, he tratado de ocultarla. Me da miedo, pero cuando mis tres captores reconocen las sombras que acechan en mi alma, sé que es demasiado tarde.
Soy su cautiva.
Son despiadados, implacables y violentos.
Los Caídos me han robado, pero hay un mal mucho peor acechando fuera, observando. Me está esperando.
La pregunta es: ¿me salvarán estos tres hombres o verán mi muerte?
Lo primero que me advierten al llegar a la casa de las chicas es que me mantenga alejada del cementerio abandonado. La leyenda urbana local afirma que alberga una puerta al infierno.
Entonces me atreví...
La leyenda es tan real como los monstruos que he invocado al activar la puerta. Los demonios la custodian, esperando que idiotas escépticos como yo hagan el ritual. Tres demonios pecaminosamente calientes y peligrosamente poderosos.
Valerian.
Matthias.
Alder.
Despiadado.
Mortal.
Aterrador.
Los tres malvados protectores de la puerta no me dejarán escapar sin pagar su precio.
Estoy a su merced, luchando por sobrevivir a ellos y al mundo sobrenatural al que me arrastran.
Pero ninguno de nosotros está preparado para lo que está despertando dentro de mí.
Un secreto largamente enterrado y una antigua magia oculta lo cambiarán todo.
La cerilla está encendida y todos juntos vamos a arder en llamas.
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